GEOGRAFÍA E HISTORIA. Marco de la Evaluación de Diagnóstico 2.º de Educación Secundaria Obligatoria

El conocimiento de nuestro pasado y de nuestro entorno facilita una mejor comprensión de la actualidad, pero también colabora al desarrollo del pensamiento crítico y a saber orientarnos en el futuro, en la conexión con el pasado y el presente. Las competencias específicas de la materia Geografía e Historia ofrece, junto con otras materias y competencias, el andamiaje necesario para que nuestros jóvenes puedan conseguir una vida plena, comprendan la íntima relación de los seres humanos con la naturaleza y actúen de forma más sostenible en su desarrollo individual y eco-social.

En la actual ley educativa, la LOMLOE, se insiste en la idea de que el proceso de enseñanza-aprendizaje debe tener como principal objetivo alcanzar una serie de competencias que se consideran indispensables para cualquier persona que termine su educación obligatoria. Estos aprendizajes deben ser no solo competenciales, sino activos, de modo que estrechen la relación entre la teoría y la práctica, entre el aprendizaje escolar y el vital. En el Anexo I del Real Decreto 217/2022, de 29 de marzo, por el que se establece la ordenación y las enseñanzas mínimas de la Educación Secundaria Obligatoria, se indica el perfil de salida del alumnado al término de la educación básica que define las competencias clave (siguiendo la Recomendación del Consejo de la Unión Europea, de 22 de mayo de 2018, los retos recogidos en el documento Key Drivers of Curricula Change in the 21st Century de la Oficina Internacional de Educación de la UNESCO y los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en septiembre de 2015 ) que se espera que hayan desarrollado al completar esta etapa de su formación.

Para cada una de esas competencias clave, se ha definido una serie de descriptores operativos. Estos descriptores, junto con los objetivos de la etapa, conforman el marco referencial a partir del cual se concretan las competencias específicas de cada materia. Los descriptores operativos orientan sobre el nivel de desempeño que se ha alcanzado en la adquisición de las competencias. Dentro de los marcos y las pruebas de Evaluación de diagnóstico se intenta medir el grado de adquisición de las competencias específicas de Geografía e Historia del alumnado en la materia de Geografía e Historia de 2.º de Educación Secundaria Obligatoria (ESO), relacionando cada competencia específica con los criterios de evaluación correspondientes.

 

Finalmente, los saberes básicos comprenden aquellos conocimientos, destrezas y actitudes que constituyen los contenidos propios de una materia cuyo aprendizaje es necesario para la adquisición de las competencias específicas. Según el Real Decreto 217/2022, arriba aludido, en esta materia los saberes básicos están estructurados en tres bloques, de modo que las dimensiones del espacio y del tiempo puedan ser interpretadas y desarrolladas a lo largo de todos los cursos, incluido 2.º ESO, permitiendo combinar el pensamiento geográfico e histórico y conectar sus métodos y campos de estudio.

La Geografía y la Historia son formas de conocimiento cuyo desarrollo competencial se trabaja a lo largo de toda la vida escolar, tanto en primaria como en secundaria, de manera integrada. Este carácter integrador posibilita el desarrollo de diversas dimensiones de las personas. La Geografía aporta esa visión espacial, necesaria para entender mejor las relaciones existentes entre las diversas sociedades humanas, y la Historia aporta la dimensión temporal; sin embargo, lejos de estar separadas, ambas pueden enseñarse de manera integradora y relacionada. De ahí, que en este marco se proponga la evaluación de estas disciplinas de forma conjunta.

Para acometer esta evaluación, el marco referencial establece una escala simplificada de progresión en el aprendizaje de las competencias histórica y geográfica a través de una selección de los procesos cognitivos implicados. En cada uno de los procesos se explicitan una serie de indicadores de logro que definen el grado de consecución de cada uno de ellos. Para ello, nos basamos en las competencias específicas, de las que nacen los criterios de evaluación, organizados a través de ejes fundamentales que permiten abordar los saberes básicos.

En el Marco de Geografía e Historia se recogen las tablas explicativas para entender más gráficamente la relación entre todos los elementos de la evaluación de diagnóstico, además de su plasmación práctica en pruebas concretas de ejemplo, que pueden resultar útiles para el profesorado.

 

Más información en: